
La irresistible comida cubana: Tradición, ingenio y sabor inolvidable
Hablar de comida cubana es hablar de identidad, de historia y también de ingenio. La gastronomía cubana no se define solo por sus platos típicos, sino por las costumbres que los rodean, la manera en que se comparten y lo que significan en la vida cotidiana.
Desde un arroz congrí servido con plátano maduro hasta una taza de café bien fuerte después del almuerzo, hay rituales que se repiten en los hogares y restaurantes de toda la isla. Saber qué se come, cómo se cocina y cómo se vive la comida cubana puede ayudarte no solo a adaptarte más rápido, sino también a entender mejor su cultura.
Este recorrido por la alimentación cubana combina sabores tradicionales, hábitos comunes y consejos prácticos para quienes llegan por primera vez.
🍽 Platos típicos que debes probar (sí o sí)
Si eres expatriado y acabas de llegar a Cuba, prepárate para comer sabroso. Aunque la oferta puede variar según la temporada o la provincia, hay clásicos que nunca faltan.
Ropa vieja
Carne de res desmechada, cocinada lentamente en salsa de tomate con ajo, pimientos y cebolla. El nombre viene de su aspecto deshilachado —como ropa rota— pero el sabor es inolvidable.
Congrí
Una mezcla de arroz y frijoles negros, cocinados juntos con especias. Es distinto del moros y cristianos, donde el arroz y los frijoles se cocinan por separado.
Lechón asado
El cerdo asado, sobre todo en fechas festivas, es el alma de la fiesta. Se marina con mojo (una mezcla de ajo, naranja agria y comino) y se cocina lento, muchas veces en púa o caja china.
Yuca con mojo
Uno de los acompañantes más comunes. Hervida y cubierta con aceite caliente, ajo y cebolla. ¡Un clásico sencillo y delicioso!
Tostones y plátanos maduros
Los plátanos verdes fritos en forma de tostones o los maduros bien caramelizados son esenciales en muchos almuerzos.
Tamal cubano
A diferencia del tamal mexicano, el cubano se hace con maíz molido fresco (no harina), manteca y carne de cerdo sazonada. Se envuelve en hojas de maíz y se cocina al vapor. Hay versiones dulces y saladas, pero el más popular es el tamal con cerdo. Muchos lo acompañan con una cucharada de mojo por encima.
Ajiaco
Este contundente guiso, hecho a base de carne de cerdo, pollo o res y una mezcla de viandas, como boniato, maíz, yuca, plátano y calabaza, es un verdadero festín de sabor.
🍮 Postres caseros cubanos: dulces que saben a infancia
No hay comida completa en Cuba sin un toque dulce. Los postres caseros son una tradición muy viva, y aunque no todos los restaurantes los ofrecen, en las casas cubanas son un clásico después del almuerzo o como merienda.
Arroz con leche
Uno de los postres más populares. Se prepara con arroz, leche, azúcar, canela y a veces ralladura de limón. Sencillo y reconfortante.
Dulce de leche cortada
Cuando la leche “se corta” (se agria), en vez de desecharla, muchos la cocinan con azúcar, canela y limón hasta convertirla en un postre espeso, caramelizado y delicioso.
Dulce de frutabomba (papaya)
Se cocina lentamente con azúcar y especias como canela o clavo hasta quedar tierna y bien dulce. A veces se sirve con queso blanco para contrastar.
Boniatillo
Un puré dulce de boniato (batata) cocinado con azúcar, canela y ralladura de limón. Muy típico en fiestas familiares.
Natilla
Una crema espesa hecha con leche, azúcar, maicena, huevo y vainilla, espolvoreada con canela por encima.
Además, en la calle y en los hogares también encontrarás una variedad de dulces tradicionales que forman parte del imaginario colectivo de los cubanos. Algunos de los más populares son: turrón de maní, casquitos de guayaba, la señorita, capuchino, merenguitos, pirulí, cabezote, masarreal, tortica, tocinillo del cielo, flan, pudín, pastelitos de coco o de guayaba, y el dulce de coco.
Muchos de estos tienen versiones caseras y otras que se venden en dulcerías o en la calle. Cada uno tiene su historia y particularidad, así que en otro artículo los exploraremos con más detalle.
🍴Costumbres cubanas en torno a la comida
Comer en familia
En muchos hogares cubanos, la cena sigue siendo la comida más importante del día. Lo tradicional es sentarse toda la familia junta —y si hay visita, se comparte.
El café después de comer
Aunque el café cubano merece un artículo aparte, vale la pena decir que es casi un ritual tomar una tacita después del almuerzo. Fuerte, corto y bien dulce.
“Lo que hay” como filosofía
La escasez de productos ha generado una cultura del aprovechamiento. La cocina cubana no se mide solo por sus recetas tradicionales, sino también por su capacidad de “resolver”, como dicen los cubanos, es parte de la cultura. La comida cubana es puro ingenio.
🍽 Comer fuera: Paladares y comida callejera
Desde hace más de una década, los llamados paladares (restaurantes privados) han cambiado la oferta gastronómica en Cuba. Si bien muchos menús están pensados para turistas, hay lugares donde la cocina casera brilla.
¿Qué encontrarás en la carta?
Platos criollos clásicos (ropa vieja, cerdo, congrí)
Mariscos (si estás cerca de la costa)
Opciones internacionales con toque cubano
Cocteles como mojito, daiquirí y Cuba libre
Algunos restaurantes también ofrecen comida vegetariana o vegana, aunque no es muy común. Preguntar antes es clave.
Si quieres comer como un cubano de a pie, prueba los puestos de comida callejera. Pan con tortilla, croquetas, la pizza cubana, batidos de guayaba, mango, mamey…
Un clásico es el pan con lechón, que se rellena con cerdo jugoso y a veces con chicharrones. O la pizza cubana, de masa gruesa, salsa dulce y queso blanco (queso típico del campo). Las frituras son imprescindibles: de malanga, maíz tierno o boniato, según lo que se consiga en el día. Junto a ellas, las chicharritas de plátano (plátano verde frito en rodajas finas) son adictivas.
Eso sí, ten cuidado con la higiene del lugar donde compres en la calle. Suelen ser muy económicos, pero no siempre se tienen todas las medidas de inocuidad alimenticia necesarias.
👉🏻¿Y la seguridad alimentaria?
Muchos expatriados se preguntan si es seguro comer en Cuba. La respuesta es sí, aunque es bueno tener en cuenta:
Bebe agua embotellada.
Come en lugares que veas limpios y con movimiento.
Si tienes dietas especiales (celíaca, vegana, keto), tendrás que adaptar mucho o cocinar en casa.
Más allá de los ingredientes, la comida cubana es un acto de comunidad, de ingenio y también de cariño. Es lo que se cocina con lo que hay, pero también con lo que se recuerda. Las recetas se pasan entre generaciones, como se pasan las canciones o las historias. Así que si vienes a vivir aquí, prepárate para que tu paladar se adapte, se sorprenda… y quizás, se enamore.
Si te interesa seguir explorando, consulta esta guía sobre gastronomía cubana.












